Viajar por trabajo puede ser frustrante por la cantidad de tiempo perdido que implica. Pasamos horas haciendo poco y nada, salvo movernos de un lugar a otro y, con suerte, enviar algún correo electrónico. Sin embargo, con un poco de preparación, podés usar este tiempo para maximizar tu productividad.
Planificá
Todo comienza en la fase de planificación. Si estás decidido a trabajar durante el viaje, tenelo en cuenta al momento de hacer las reservas. ¿Podés trabajar en el medio de transporte elegido? ¿La habitación del hotel tiene buena conexión wifi y un escritorio adecuado? Si organizás todo tu viaje pensando en aumentar tu productividad, realmente vas a aprovecharlo al máximo.
Pensá qué hacer y cuándo
Otra buena manera de aumentar la productividad es realizar el trabajo que mejor se adecúe al entorno. Por ejemplo, podés encargarte fácilmente de tareas administrativas simples, como organizar tu bandeja de entrada, en lugares concurridos o durante un trayecto en taxi o en tren, especialmente cuando no tenés demasiado tiempo. En cambio, podés reservarte las tareas que requieren mucha concentración, como redactar un informe, para entornos tranquilos en los que vas a estar más tiempo.
Aprovechá tu tiempo en el aire
Cuando tengas que tomar un vuelo largo que no ofrezca conexión a Internet, aprovechá estas horas para escribir correos que puedas enviar más tarde, leer algún proyecto o resolver temas pendientes. Y antes de despegar, no te olvides de descargar los archivos indispensables para poder trabajar en el avión.
Anticipate a imprevistos
Si hay algo que no debería pasar es que tus dispositivos se queden sin batería. Llevá siempre tus cargadores y, si viajas al exterior, no olvides los adaptadores para enchufes internacionales. Si, a pesar de todo, tu laptop se queda sin batería o simplemente no podés usarla, trabajá con aplicaciones que tengan versiones para smartphones para contar siempre con alternativas.
Minimizá las distracciones
No te olvides del mejor amigo del viajero de negocios: un buen par de auriculares con cancelación de ruido, el aliado perfecto para concentrarte y evitar interrupciones estés donde estés.
Por último, recordá que no todo es trabajo. Intentá descansar, aprovechá para hacer nuevos contactos y participá en alguna actividad que te resulte interesante. De esta forma, tus viajes van a ser grandes oportunidades para crecer tanto en lo profesional como en lo personal.