
No dormir bien puede afectar nuestras emociones y nuestra rutina. Pero ¿De qué manera podemos remediarlo? Acá te lo contamos.
Empezá a dormir mejor a partir de esta noche contratando un Seguro de Salud de La Caja y descansá con la tranquilidad de saber que tus seres queridos van a estar protegidos.
¡Buenas noches!
Aunque parezca que lo único que estamos haciendo es estar quietos y soñar, todo esto pasa en nuestro cuerpo mientras dormimos.
Por eso es muy importante poder disfrutar de un buen descanso, cosa que no siempre es fácil. Por eso queremos compartirte estos consejos que van a ayudarte a conciliar mejor el sueño, para poder disfrutar de tu día en forma más saludable.
Evitá luces y ruidos al momento de dormir.
La oscuridad hace que tu cerebro libere melatonina, que genera en tu cuerpo un efecto calmante y somnoliento. Por eso te recomendamos que al momento de dormir, lo hagas en un ambiente donde puedas disfutar de oscuridad y silencio.
Invertí en tu comodidad.
Tan importante como dormir, es poder hacerlo en una cama cómoda que te ayude a relajarte, con una temperatura que te resulte agradable. Pasamos aproximadamente un tercio de nuestras vidas durmiendo, por lo que vale la pena que ese tercio lo disrutemos como se debe.
Mantené una rutina horaria.
Por más evolucionados que estemos, seguimos siendo animales de costumbre. Por lo que es posible acostumbrar a tu cuerpo a que se “prepare para el descanso” si mantenemos una misma rutina todos los días a la misma hora.
Evitá comidas y bebidas pesadas a la noche.
La digestión es un proceso de nuestro cuerpo que consume energía. De hecho, un 10% de las calorías quemadas a diario es producto del trabajo de digestión que nuestro cuerpo realiza. Por eso comer o beber de más a la noche puede hacer que tu cuerpo no entre en un estado de relajación.
¡No te acuestes si estás despierto!
Por último, a veces nos forzamos a ir a la cama incluso si no tenemos nada de sueño. ¡Esto puede resultar contraproducente! En lugar de intentar forzar a nuestro cuerpo, es recomendable levantarnos y realizar una actividad relajante durante 10 o 20 minutos, que predispongan a nuestro cuerpo naturalmente a descansar.