A medida que pasan los años, comenzamos a notar pequeños cambios en nuestro cuerpo que nos muestran que el paso del tiempo nos llega a todos. Estas pequeñas señales nos avisan que es hora de cuidar la salud más de cerca y de tomar precauciones que, hasta hace poco tiempo, parecían innecesarias. Una de las cuestiones a conversar con el médico de cabecera es la posibilidad de tomar suplementos nutricionales que ayuden al cuerpo a mantenerse joven.
Las vitaminas y minerales son necesarios en todas las edades, pero en las personas de más de 40 años hay que tener cuidados extra porque estos nutrientes ya no se absorben con tanta facilidad. Además, la falta de apetito, algunos medicamentos y ciertas patologías a veces dificultan la correcta incorporación de estos compuestos tan esenciales.
La alimentación sana y equilibrada es el primer paso para contar con todos los nutrientes que el cuerpo necesita. A su vez, hay suplementos diarios que te pueden ayudar a mantenerte sano y en forma. Acá te presentamos una lista de ellos, pero tené en cuenta que más allá de cuidarnos, la posibilidad de desarrollar alguna enfermedad existe. Por ese motivo, recomendamos contratar un seguro de salud como el que ofrecemos en La Caja, ya que permite que vos y tu familia estén preparados para cualquier eventualidad.
Vitamina B12: Es esencial para la sangre y la función cerebral. La capacidad de absorción de la vitamina B12 disminuye a medida que pasan los años, así que preguntale a tu médico qué te conviene hacer para que nunca te falte este nutriente esencial.
Calcio: Este mineral es fundamental para mantener la salud ósea. Como se encuentra en los lácteos, se recomienda incluir estos alimentos en la dieta diaria para mantener huesos fuertes. Pero tené mucho cuidado: el exceso de calcio puede ser perjudicial.
Vitamina D: Te protege de ciertas enfermedades que son más frecuentes en las personas maduras, como la diabetes o las cardiopatías, porque reduce la pérdida de músculo. La vitamina D favorece la absorción del calcio y refuerza el sistema inmunitario. Esta vitamina la podés encontrar en alimentos como el hígado, pescados grasos (sardina, caballa y salmón), leche enriquecida con vitamina D y yema de huevo. Un dato importante es que obtenemos gran parte de la vitamina D que necesitamos de la luz solar, así que asegurate de estar al sol durante al menos 10 minutos cada día.
Magnesio y potasio: Estos dos minerales son esenciales para fortalecer los huesos y mantener un buen sistema muscular. Si seguís una dieta sana y equilibrada, lo más probable es que consumas la cantidad suficiente. Sin embargo, tené cuidado y evitá una deficiencia porque podría afectar tu presión arterial.
Omega 3: Consumir mucho omega 3 aporta una gran cantidad de beneficios, desde contrarrestar el declive cognitivo hasta reducir el riesgo de sufrir cardiopatías. Para tener niveles adecuados de omega 3, te aconsejamos consumir pescado azul.
Recordá que antes de tomar cualquier suplemento o si tenés alguna duda, siempre tenés que consultar con tu médico. Mejorar tu calidad de vida y cuidar tu salud, puede ser fácil tomando estos consejos.
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