Cuando la familia se agranda porque llegaron los hijos, encontrar tiempo para uno mismo es todo un desafío. Son tantas las tareas y obligaciones que en un abrir y cerrar de ojos ya llegó la hora de ir a dormir. Sin embargo, dedicar tiempo a uno mismo es esencial para el bienestar mental y físico, y para mantener una buena relación con la familia y el entorno.
El problema es que, aún sabiendo eso, es difícil hallar ese espacio que tanto necesitamos. Acá te dejamos algunos consejos para que tu rutina diaria siempre incluya un rato para disfrutar.
Encontrá momentos para vos
Los padres suelen tener muy poco tiempo libre. Cuidar a los chicos ocupa tanto tiempo y energía que les cuesta encontrar el rato que necesitan para dedicarse a ellos mismos. Sin embargo, es muy importante que lo hagan. Algunos pequeños cambios en la rutina pueden ayudarte a conseguir esos valiosos minutos para vos:
- Escribí una lista de las tareas que más tiempo te llevan y que podrías delegarle a alguien más. Ya sea cocinar o limpiar, ¿por qué no dividir los quehaceres domésticos con el resto de la familia? Es importante que no te sobrecargues.
- Armate un calendario con los ratos que son para vos y proponete cumplirlos. Ponete recordatorios para cada semana, mes y trimestre así te asegurás de antemano que ningún imprevisto te va a impedir disfrutar de esos momentos. Compartí este calendario con tu familia. Es importante que ellos sepan qué espacios son sólo tuyos así aprenden a respetar tu tiempo libre.
- Definir horarios estrictos para cenar y acostarse es excelente para delimitar tu tiempo y establecer una rutina sólida con tu familia. Es muy tentador usar esas horas para hacer todo lo que te quedó pendiente, pero no caigas en esa tentación. Dejate al menos una o dos horas libres para vos. Rápidamente te vas a dar cuenta lo bien que te hacen y vas a sentir un alivio cuando llegan.
¿Querés más tácticas? Podés hacer las compras del supermercado por Internet, cocinar porciones de más y congelarlas para tener comida siempre a mano, y turnarte con otros padres para buscar o llevar a los chicos al colegio. Estos pequeños cambios son más efectivos de lo que parecen.
Consejos de cuidado exprés
Los padres enfrentan listas interminables de tareas, al punto que ni siquiera los fines de semana pueden desconectarse de sus obligaciones. Reservá cinco o diez minutos a la mañana y a la noche para tomarte una pausa, respirar y reflexionar. Tomarte esos pocos minutos te va a ayudar muchísimo a terminar el día sintiendo tranquilidad.
Escribí una lista de todas las actividades que te gustan y te relajan. Dividilas entre aquellas que podés hacer fácilmente y las que requieren algo de planificación. Por ejemplo, leer el diario, ir al gimnasio o mirar una buena película en la televisión son pasatiempos que podés hacer en cualquier momento. Sin embargo, encontrarte con amigos o ir al cine suele requerir más tiempo y organización. Incluí en tu lista semanal al menos una actividad que te lleve poco tiempo y date el gusto de hacer una salida más elaborada una vez al mes o cada tres meses. Es importante que siempre hagas algo que te motive.
No descuides tu dieta ni las horas de sueño
Además de los hobbies y pasatiempos, la nutrición, el descanso y el ejercicio son vitales para tener un cuerpo y una mente saludable. Está comprobado que aumentar la ingesta de frutas y verduras, reducir el consumo de cafeína y alcohol y hacer actividad física regularmente mejoran el estado de ánimo. Recordá que no dormir lo suficiente tiene consecuencias muy negativas. Las investigaciones demuestran que las horas que dormís antes de la medianoche son las más valiosas, así que sé estricto con el horario de ir a la cama.
Por último, recordá que no todo es urgente y no tenés por qué hacerlo solo. Tu familia puede compartir muchas de las obligaciones y es bueno para los chicos ver que todos son responsables de las tareas diarias. Organizá el trabajo, establecé rutinas estrictas y programá momentos para vos. Contar con tu espacio de esparcimiento y descanso te va a ayudar a sentirte más alegre y con más energía. ¡Eso es bueno para tu familia y para vos!
Todos queremos que nuestra familia disfrute y sea feliz. Seguí nuestros consejos para que la vida en casa sea más placentera, alegre y organizada:
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