Seamos sinceros: limpiar la casa es lo último que queremos hacer en nuestro tiempo libre. A todos nos gusta llegar del trabajo y encontrar un hogar limpio y ordenado, pero lograrlo da tanto trabajo que muchas veces lo pasamos por alto. Sin embargo, hay pequeños hábitos cotidianos que nos pueden ayudar a mantener nuestros espacios brillantes y relucientes con muy poco esfuerzo.
Trucos para la cocina
Limpiar el horno es una de las tareas más fastidiosas de todas. Sin embargo, el bicarbonato de sodio es tu gran aliado. Lo podés usar de dos maneras:
- Una de ellas es mezclarlo con agua, rociarlo por las diferentes superficies y luego enjuagarlo.
- La otra consiste en agregarle una cantidad menor de agua para hacer una pasta que puedas esparcir por todo el horno, incluyendo la puerta. Después de 30 minutos, pasá un paño húmedo por la puerta, pero dejá que repose toda la noche en el resto del horno.
En cuanto a los estantes y las rejillas, poné un poco de jabón en polvo en un balde u otro recipiente con agua caliente y dejalos ahí adentro durante toda la noche.
Para que tus hornallas estén relucientes, mezclá:
- 1 cucharada de sal.
- 1 cucharada de bicarbonato de sodio.
- 1 cucharada de agua.
Esparcí esta pasta por toda la superficie para eliminar la suciedad y la grasa acumulada.
Trucos para el comedor
A nadie le gusta tener sillones manchados o desgastados en su living, así que no te resignes a verlos así. Un cepillo común y corriente puede hacer que los colores cobren vida de nuevo. La manera de limpiarlos es la siguiente: dales una buena cepillada para liberar la suciedad y el polvo de la tela, para luego pasar la aspiradora sobre el tapizado. Vas a ver que inmediatamente los colores se van a ver mucho más vibrantes.
Sacar las manchas de grasa puede ser un dolor de cabeza, pero tené en cuenta que la sal es excelente para absorber el aceite. Esparcí un poco de sal sobre la mancha, dejala actuar por 30 minutos y luego pasá la aspiradora. Este truco también funciona para las alfombras y la ropa. ¿Y qué hacer con esas manchas de vino tinto? La respuesta está en tu heladera. Tirá un poco de leche sobre la mancha, dejala reposar durante media hora y después secala con un trapo húmedo.
Trucos para el baño
Como bien sabrás, la humedad de los baños hace que el moho sea un problema muy común. Para limpiar los azulejos, mezclá vinagre y bicarbonato de sodio hasta formar una pasta. Esparcila, dejala actuar durante 30 minutos y, después, usá un cepillo de dientes viejo para sacar toda la suciedad. Cuando las cortinas de la ducha tengan moho, ponelas en el lavarropas con media taza de bicarbonato y jabón. Antes de que empiece el ciclo de enjuague, agregá media taza de vinagre de vino blanco.
Por más confianza que le tengas a los artículos de limpieza tradicionales, siempre vale la pena probar otras opciones. Estos trucos te van a ayudar a limpiar mejor, ahorrar tiempo, gastar menos dinero y, como si fuera poco, a implementar métodos que son mucho más ecológicos.
Queremos que tengas a mano la mejor tecnología disponible para cuidar tu salud y la de tu familia. Con el Seguro de Salud podés acceder a video consultas en tiempo real con más de 350 profesionales médicos. Hacé click acá para saber más.
Por último, recordá que contar con un seguro para tu casa es fundamental para poder disfrutarla tranquilo. En La Caja te ofrecemos varias opciones de cobertura para que vos y tu familia estén resguardados.
