Con el paso del tiempo es normal que las bicicletas se vayan deteriorando y su funcionamiento ya no sea el mejor. En estas situaciones, muchas veces solo basta con el reemplazo de las piezas afectadas, sin embargo en otras, lo más recomendable es cambiar la bici.
Existen razones por las cuales se deterioran y pierden su funcionamiento. Acá te contamos algunas:
- Condiciones climáticas: La humedad en el aire, la lluvia o el calor constante afectan su rendimiento.
- Uso indebido: Existen bicis específicas para cada modalidad. Por ejemplo; no es correcto usar una bici de paseo para realizar actividades extremas. Estos usos hacen que se excedan sus capacidades y las fallas empiezan a aparecer.
- Mantenimiento inadecuado: Las bicis son como los autos, necesitan siempre revisiones y limpiezas constantes para cuidar su funcionamiento. No preocuparse por esto ocasionará problemas en el futuro.
Si un ciclista interpreta el comportamiento de su bici y sabe reconocer su funcionamiento, determinar el momento indicado para cambiarla será una tarea sencilla.
Te contamos 4 razones principales para hacerlo:
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Sensación de inseguridad.
Si viajar en la bici, genera una sensación de inseguridad debido a fallas en algunas de sus piezas, es importante cambiarla para evitar accidentes. Lo mejor es viajar con tranquilidad y confianza en cada recorrido.
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Reparaciones reiteradas.
Las reparaciones después de algún tiempo de uso son aceptables, pero si al año las visitas al taller superan las 4 veces, es una clara señal para cambiar de bici. Una bicicleta que necesita varias reparaciones en cortos periodos de tiempo, indica que ya está excediendo sus años de vida útil. -
Incomodidad.
Los viajes en bicicleta siempre deben ser cómodos y satisfactorios, por lo que, si en algún momento comienzan a aparecer dolores de espalda o dolores musculares, es probable que la altura del sillín o de los manillares afecten el cuerpo. Esto es un indicador de que la bicicleta no está siendo apta para las actividades físicas que se practican. -
Cambio de modalidad.
El mundo del ciclismo cuenta con una gran cantidad de modalidades, todas ellas se diferencian entre sí por las exigencias que requieren.
Por ejemplo: si sos un ciclista casual, que viaja por la ciudad y querés hacer ciclismo de montaña, cambiar la bicicleta es necesario para lograr los mejores resultados.
Reemplazar nuestra bici a veces puede ser difícil, no solo por el gasto económico que representa, sino también, por el cariño y la nostalgia que podemos llegar a tener por ellas. Sin embargo, tener una nueva nos permitirá disfrutar más y tener mejores experiencias.