Es normal que durante el verano, aumente la temperatura en los espacios del hogar y la frescura disminuya notablemente. Para solucionar este problema, en esta nota, te vamos a contar algunos tips que te ayudarán a mantener tu casa mucho más fresca a pesar del calor y sin necesidad de usar el aire acondicionado.
Pero antes de empezar, recordá siempre que con el Seguro de Hogar de La Caja, podés disfrutar la tranquilidad que vos y tu familia están buscando.
¡Ahora sí, vamos a los tips!
VENTILÁ TU CASA
Aunque sea la recomendación más común, sigue siendo la más importante. No olvides que lo mejor será siempre ventilar tu casa a primera hora en la mañana y por la noche, ya que el aire, en este horario, suele ser más fresco y conseguirás que no se filtre exceso de calor.
VESTÍ TU HOGAR DE VERANO
Es esencial que retires las cortinas y alfombras de invierno. En verano, va a ayudarte que los suelos de tu hogar estén libres y que las ventanas estén cubiertas por tejidos livianos de tonos claros.
Este sencillo gesto hará que la casa aporte mayor sensación de frescor.
COCINÁ SOLO EN LA MAÑANA
No hay duda de que la mañana es el momento ideal para cocinar. Aún más, si evitas utilizar el horno y el fuego.
Intentá cocinar siempre platos fríos, como ensaladas y otras recetas, que puedas conservar en la heladera una vez elaboradas.
Si, por el contrario, preferís cocinar con fuego, realizá recetas que puedan comerse a temperatura ambiente para que no tengas la necesidad de volver a calentarla y de esta manera sofocar los espacios del hogar.
SUELOS
Si tenés pisos cerámicos y querés obtener esa sensación inigualable de frescor, poneles agua fría a los suelos de tu terraza, balcones y habitaciones. Comprobarás lo eficaz que resulta para bajar la temperatura.
ENFRIÁ LA CAMA
La habitación es un lugar esencial y necesario para el descanso. Por eso, si el calor no te deja dormir en las noches, tenés que usar este truco: envolvé una botella de agua helada en una toalla, ponela en la zona de la almohada poco antes de irte a descansar y listo. Cuando apoyes la cabeza, vas a sentir una frescura que no vas a poder creer.
¡A disfrutar de la frescura de nuestro hogar!