No es necesario aislarse en una comuna ecológica o irse a vivir a una "ecoaldea" para contribuir a mejorar el medio ambiente. Te damos 10 sencillos consejos que podés poner en práctica desde hoy mismo para ayudar a salvar el planeta.
- En caso de duda, dejalo en 30 grados
Usá agua fría o una temperatura baja en el lavarropas, a menos que tu ropa necesite una buena limpieza. También asegurate de que la carga esté completa y elegí el programa de lavado corto para gastar menos agua.
- Apagá, no dejes en suspensión
Si dejás los electrodomésticos en suspensión, o stand-by, seguís consumiendo mucha electricidad porque no están apagados. Si querés ahorrar energía, tenés que desenchufarlos por completo cuando no los usás.
- Intentá pasar los domingos sin mirar la pantalla
Si evitás conectar aparatos durante determinadas horas, tus sobrecargados sentidos tendrán un merecido descanso. Además, si tenés hijos, podrás pasar el rato jugando, leyendo y charlando con ellos.
- Separá los residuos
Para que los residuos domésticos puedan convertirse en recursos reusables, tenés que separarlos y clasificarlos. En los barrios de casi todas las grandes ciudades del país, ya hay contenedores verdes y grises donde depositar las bolsas diferenciadas. El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires también ofrece una Guía de separación para consultar en caso de dudas.
- Rotulá todo
Poné etiquetas debajo de los interruptores para recordarles a todos que los apaguen cuando no los utilicen, lo que resulta ideal para enseñar a los niños a ser más respetuosos con el medio ambiente.
- Aislá, aislá y aislá
Colocá burletes en las puertas, cortinas en la parte interior de las puertas si vivís en un departamento y una lámina especial detrás de los radiadores. De este modo, tu casa va a conservar mejor el calor, y vas a consumir menos calefacción en invierno.
- Disminuí el consumo innecesario y repará
Hacé un curso de costura, llevá tu propia bolsa cuando vayas al supermercado y comprá envases de vidrio retornables. Estas son solo algunas de las tantas cosas que podés hacer para reducir tu impacto ecológico. Si buscás en sitios como Pinterest, vas a encontrar todo tipo de tutoriales excelentes para empezar a pensar en verde.
- Hoy movete sin auto
Si no podés abandonar completamente el auto, averiguá si algún colega vive cerca para compartir el trayecto al trabajo. También podrías ir en bicicleta o incluso caminando si las distancias son cortas. Tu salud (y el planeta) te lo agradecerán.
- Usá más ingredientes naturales
Evitá usar gel de ducha, cremas faciales o productos de limpieza del hogar que contengan ingredientes abrasivos que puedan dañar el planeta. Podés conseguir buenos resultados de limpieza con ingredientes domésticos como bicarbonato, limón o vinagre.
- Cuidá el agua en el baño y la ducha
El baño es el lugar donde más agua consumimos. Procurá tomar duchas de 5 minutos en lugar de baños más prolongados o de inmersión. No dejes correr el agua y cerrá la canilla mientras te enjabonás o te lavás los dientes. Y no te olvides de la temperatura; tomar un baño tan caliente no es bueno para tu piel ni para el medio ambiente. Por el contrario, una ducha fría rápida libera dopamina en el cerebro para hacerte sentir bien y empezar el día con energía.
Cada actividad que realizamos deja una huella en nuestro planeta. Poner en práctica las “3 R” de la ecología (reciclar, reutilizar y reducir) es la mejor forma de no caer en el derroche ni en el consumismo. Si tomás consciencia y cambiás algunos hábitos, podés aportar tu granito de arena para cuidar el planeta y asegurar una mejor calidad de vida para las próximas generaciones.